Las 2 implicadas en el asesinato de Miriam Fefer madre de Eva Bracamente, suplicaron llorando a la segunda sala penal que se les permita afrontar en libertar el jucio en su contra.
Liliana Castro Manarelli y Eva Bracamonte Fefer, procesadas por la muerte de la empresaria peruana Myriam Fefer –madre de la segunda- lloraron hoy al solicitar a la Segunda Sala Penal Pare Reso en Cárcel, afrontar en libertad el juicio en su contra, informó su abogado, Víctor Pérez Liendo.
La audiencia, de carácter reservado, se llevó a cabo en el penal de mujeres de Chorrillos, donde las jóvenes están internas desde setiembre de 2009, cuando se pusieron a disposición del 17 Juzgado Penal de Lima y se ordenara su detención inmediata. Hasta el lugar llegaron la madre y la hermana de Castro, quienes evitaron declarar a la prensa.
Pérez Liendo informó que durante la diligencia Manarelli y Bracamonte ratificaron su inocencia e insistieron en que su detención “malogra” sus proyectos de vida. En el caso de Eva, el abogado dijo que sufre “el doble” pues no sólo siente el dolor de la pérdida de su madre, sino que también el peso de estar detenida siendo inocente.
El letrado también cuestionó la versión policial que alega que ambas mujeres viajaron a Argentina para entregar cinco mil dólares al sicario colombiano Alejandro Trujillo Ospina un año después de cometido el crimen, perpetrado el 2006.
Según Pérez Liendo, el propio sicario ha admitido que ingresó al Perú en la fecha en la que sus defendidas estaban en Argentina. Agregó que los cinco mil dólares a los que se hace referencia se utilizaron para pagar su estadía de nueve meses en el país vecino.
El tribunal dejó al voto el pedido de las acusadas, el mismo que deberá ser resuelto en 15 días.
La audiencia, de carácter reservado, se llevó a cabo en el penal de mujeres de Chorrillos, donde las jóvenes están internas desde setiembre de 2009, cuando se pusieron a disposición del 17 Juzgado Penal de Lima y se ordenara su detención inmediata. Hasta el lugar llegaron la madre y la hermana de Castro, quienes evitaron declarar a la prensa.
Pérez Liendo informó que durante la diligencia Manarelli y Bracamonte ratificaron su inocencia e insistieron en que su detención “malogra” sus proyectos de vida. En el caso de Eva, el abogado dijo que sufre “el doble” pues no sólo siente el dolor de la pérdida de su madre, sino que también el peso de estar detenida siendo inocente.
El letrado también cuestionó la versión policial que alega que ambas mujeres viajaron a Argentina para entregar cinco mil dólares al sicario colombiano Alejandro Trujillo Ospina un año después de cometido el crimen, perpetrado el 2006.
Según Pérez Liendo, el propio sicario ha admitido que ingresó al Perú en la fecha en la que sus defendidas estaban en Argentina. Agregó que los cinco mil dólares a los que se hace referencia se utilizaron para pagar su estadía de nueve meses en el país vecino.
El tribunal dejó al voto el pedido de las acusadas, el mismo que deberá ser resuelto en 15 días.
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