Los pobladores aymaras de Ácora han rechazado tajantemente los saqueos suscitados en la ciudad de Puno y acusaron a personas infiltradas quienes se aprovecharon de la situación para hacer actos vandálicos que los involucra directamente a ellos.
A su vez han puesto punto final a su protesta antiminera y han señalado que suspenden el paro hasta pasada las elecciones para hacer efectivo su acto cívico de ir a las urnas y efectuar su voto el 5 de junio en donde se elegirá al sucesor del presidente Alan García.
"Nosotros estamos suspendiendo (el paro) solamente dentro de esta semana para que el gobierno no nos declare en emergencia esta región Puno", señalo Tito Cruz Cutipa del Comité de Lucha de Ácora.
Como recordamos el sábado por la noche, representantes del gobierno de Alan García y una delegación de la ciudad de Puno habían llegado a un acuerdo que impedía la actividad minera en esa región por un año.
Pero este domingo los manifestantes, que llevan tres semanas de protesta, ratificaron que quieren que esta prohibición sea definitiva y abalada por un decreto supremo. "Rechazamos ese acuerdo porque no ajusta a lo que la población pide", indicó Walter Aduviri, líder del Frente de Defensa de Puno, que dirige la protesta.
El representante de la etnia aymara recordó que las principales demandas son "la cancelación de las concesiones mineras al sur de Puno y la suspensión del proyecto minero Santa Ana (de la canadiense Bear Creek)". "No se ha logrado nada, las protestas continuarán", añadió.
Con información de LaMula.pe
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