Los representantes de las Iglesias Católicas de Bolivia, Perú y Chile se reunieron en Santiago de Chile, donde evaluaron la situación de los países y llegaron a la conclusión de que el cambio climático está empobreciendo más a los pobres y que el narcotráfico “continúa creciendo amenazando a nuestros jóvenes”.
En el encuentro celebrado en la capital chilena participaron los obispos que son miembros de los Consejos Episcopales Permanentes de los tres países. El cardenal Julio Terrazas encabezó la delegación boliviana como se muestra en la fotografía que se publica.
“En sus reflexiones sobresalen sus preocupaciones por los efectos del cambio climático, la situación de los pueblos originarios, la falta de empleo digno y el crecimiento del narcotráfico”, señala a modo de resumen el documento emitido, mediante la Conferencia Episcopal de Bolivia, en la jornada de este domingo.
“Los problemas afligen y hacen sufrir a nuestros pueblos, como el cambio climático, que empeora la ya difícil situación de los más pobres y las enormes desigualdades sociales, que aumentan entre nosotros y son causa de preocupación para la Iglesia”, apunta la declaración firmada por los obispos.
Los tres países tienen sociedades fuertemente católicas. En el caso de Chile y Perú, los gobiernos respectivos sostienen una relación fluida lo que no ocurre con el caso de Bolivia, cuyo presidente, Evo Morales, ha marcado significativas distancias con la Iglesia Católica, a cuya cúpula criticó en diversas oportunidades.
Sobre los cambios políticos experimentados en la región, los obispos expresan su alegría por los signos de esperanza que “aparecen en nuestros países en la línea de una mayor inclusión social, pero sigue siendo preocupante la utilización que se está dando de sus justas demandas”.
En el encuentro celebrado en la capital chilena participaron los obispos que son miembros de los Consejos Episcopales Permanentes de los tres países. El cardenal Julio Terrazas encabezó la delegación boliviana como se muestra en la fotografía que se publica.
“En sus reflexiones sobresalen sus preocupaciones por los efectos del cambio climático, la situación de los pueblos originarios, la falta de empleo digno y el crecimiento del narcotráfico”, señala a modo de resumen el documento emitido, mediante la Conferencia Episcopal de Bolivia, en la jornada de este domingo.
“Los problemas afligen y hacen sufrir a nuestros pueblos, como el cambio climático, que empeora la ya difícil situación de los más pobres y las enormes desigualdades sociales, que aumentan entre nosotros y son causa de preocupación para la Iglesia”, apunta la declaración firmada por los obispos.
Los tres países tienen sociedades fuertemente católicas. En el caso de Chile y Perú, los gobiernos respectivos sostienen una relación fluida lo que no ocurre con el caso de Bolivia, cuyo presidente, Evo Morales, ha marcado significativas distancias con la Iglesia Católica, a cuya cúpula criticó en diversas oportunidades.
Sobre los cambios políticos experimentados en la región, los obispos expresan su alegría por los signos de esperanza que “aparecen en nuestros países en la línea de una mayor inclusión social, pero sigue siendo preocupante la utilización que se está dando de sus justas demandas”.
Fuente: opinion.com.bo
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