Trás la ola de violencia sexual contra mujer que se vive en La India, una turista británica se fracturó una pierna tras saltar por la ventana de un hotel para escapar de una agresión sexual en la ciudad india de Agra, mientras el Parlamento aprobó un proyecto de ley para endurecer ese tipo de ataques.
La joven, de 25 años de edad e identificada como Jessica, denunció que el dueño del hotel trató de abusar de ella, por lo que saltó por una ventana del primer piso para evitarlo, informó el vocero policial de Agra, Pawan Kumar, citado por la agencia Press Trust of India (PTI).
El portavoz de la embajada británica en India anunció que funcionarios del consulado de Nueva Delhi se han puesto en contacto con la mujer y con la policía local y que, en estos momentos, un equipo consular se está desplazando a Agra para prestar su asistencia.
El incidente ocurrió esta madrugada después de que el viernes pasado una turista suiza fuera violada en grupo en presencia de su esposo en un área boscosa en el central estado de Nadhya Pradesh, lo que generó dudas sobre la seguridad de las turistas en India.
Las autoridades indias han adoptado medidas especiales durante las últimas semanas contra las violaciones y abusos sexuales en el país, a raíz de la consternación que generó en diciembre pasado la violación y muerte de una estudiante de 23 años en Nueva Delhi.
Desde entonces, la prensa india publica casi a diario denuncias de violaciones registradas en todo el país y el gobierno se ha visto obligado a someter al Parlamento una nueva ley para endurecer las penas a los agresores sexuales.
Este martes, el Parlamento indio aprobó un proyecto de ley que endurece las sentencias contra los agresores sexuales, pues prevé aumentar la pena mínima de cárcel por violación de siete a 20 años y la máxima a cadena perpetua.
El proyecto establece la pena capital en caso de la muerte de la víctima o que ésta quede en estado vegetativo, además endurece los castigos por ataques de ácido que causen desfiguraciones, con un mínimo de 10 años de cárcel e incluso cadena perpetua.
La enmienda también prevé que en el caso de militares acusados de cometer agresiones sexuales sean tribunales marciales y no civiles los que juzguen el caso.
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