“Me tomé todas mis pastillas. Moriré pronto. Chao, chao a todos”, publicó en su perfil Simone Back. Algunos de sus 1,048 contactos que leyeron su mensaje desestimaron sus palabras, la tildaron de mentirosa e incluso se burlaron de ella.
“Me tomé todas mis pastillas. Moriré pronto. Chao, chao a todos”, publicó en su perfil Simone Back. Algunos de sus 1,048 contactos que leyeron su mensaje desestimaron sus palabras, la tildaron de mentirosa e incluso se burlaron de ella.
Su madre pudo percatarse de su muerte recién al día siguiente pues, como es inválida, no pudo subir al segundo piso, donde se encontraba el cadáver. Se enteró por medio de un mensaje de texto que le envió una amiga de Back, que le advertía sobre el mensaje que posteó su hija. Horas más tarde llegó la Policía.
El mensaje fue publicado el 25 de diciembre a las 22:53 hora local. Ocho minutos después, uno de sus contactos dijo: “Lo hace todo el tiempo y está mintiendo”. Otro, por su parte, publicó: “Espero que esté mintiendo sobre esto, sino te sentirás muy culpable mañana”. Y así se armó un debate mientras Back moría.
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