Otra joyita del "Rei", llegó a los entrenamientos con fuerte aliento a licor y fingió haber sido victima de un secuestro exprés.
El Atlante de México ha comunicado que da de baja al futbolista peruano Reimond Manco por presentarse al entrenamiento del pasado jueves con aliento alcohólico y por fingir un secuestro en un balneario de Cancún.
"La Directiva del Club Atlante informa que este jueves levantó un acta administrativa al futbolista peruano Reimond Manco, quien se presentó al entrenamiento matutino de este día en muy malas condiciones físicas y con un fuerte aliento alcohólico, lo que es considerado dentro del reglamento de la institución como una falta grave y que amerita la rescisión de su contrato", ha anunciado el club.
En el comunicado, el club azulgrana ha señalado que el profesional de 20 años salió el miércoles a cenar junto con un primo y según versiones del futbolista fue víctima de un secuestro exprés.
"Tan pronto como el jugador sudamericano se presentó a la práctica de este jueves, el técnico atlantista, Miguel Herrera, en conjunto con el jefe de los servicios médicos, Juan Manuel Mejía, fueron quienes notaron las condiciones en las que Manco se presentaba".
Según el comunicado de inmediato ordenaron al jugador "realizarse exámenes médicos para determinar los grados de alcohol con los que contaba el futbolista alrededor de las nueve de la mañana".
El propio jugador argumentó en su defensa que había sido víctima de un secuestro, un acto que el club de Primera División no creyó debido a que no es la primera vez que el volante peruano se presenta en estas condiciones. "No es la primera ocasión en la se ve envuelto en este tipo de problemas y actitudes fuera de la cancha", destaca el comunicado.
Según el plantel, el ex jugador de Alianza Lima peruano y PSV holandés inventó la versión de un secuestro para justificar su retraso a la práctica con el resto del plantel.
"La Directiva del Club Atlante informa que este jueves levantó un acta administrativa al futbolista peruano Reimond Manco, quien se presentó al entrenamiento matutino de este día en muy malas condiciones físicas y con un fuerte aliento alcohólico, lo que es considerado dentro del reglamento de la institución como una falta grave y que amerita la rescisión de su contrato", ha anunciado el club.
En el comunicado, el club azulgrana ha señalado que el profesional de 20 años salió el miércoles a cenar junto con un primo y según versiones del futbolista fue víctima de un secuestro exprés.
"Tan pronto como el jugador sudamericano se presentó a la práctica de este jueves, el técnico atlantista, Miguel Herrera, en conjunto con el jefe de los servicios médicos, Juan Manuel Mejía, fueron quienes notaron las condiciones en las que Manco se presentaba".
Según el comunicado de inmediato ordenaron al jugador "realizarse exámenes médicos para determinar los grados de alcohol con los que contaba el futbolista alrededor de las nueve de la mañana".
El propio jugador argumentó en su defensa que había sido víctima de un secuestro, un acto que el club de Primera División no creyó debido a que no es la primera vez que el volante peruano se presenta en estas condiciones. "No es la primera ocasión en la se ve envuelto en este tipo de problemas y actitudes fuera de la cancha", destaca el comunicado.
Según el plantel, el ex jugador de Alianza Lima peruano y PSV holandés inventó la versión de un secuestro para justificar su retraso a la práctica con el resto del plantel.
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