El arquero suplente de Suecia, Johan Wiland se bajó los pantalones y se inclinó a la espera de que sus compañeros, le peteen balones en el trasero, esto como castigo por haber perdido en un juego.
El juego en el que perdió, consistía en no dejar que la pelota tocara el suelo, mientras se la pasaban unos a otros. Lamentablemente Wiland perdió.
Afortunadamente nadie logró darle en el trasero mientras que el portavoz del equipo tuvo que salir a aclarar que el hecho solo se trató de un juego, debido a que las cámaras tomaron la secuencia y las imágenes dieron vuelta al mundo.
"Es ridículo decir que fue un acto de acoso. Era simplemente un juego. Los que juegan al fútbol saben que se hace por diversión", afirma el responsable de prensa de la Federación.
De esta manera los jugadores tratan de pasarla bien antes de que Suecia se enfrente este viernes con Inglaterra por la Eurocopa.
El juego en el que perdió, consistía en no dejar que la pelota tocara el suelo, mientras se la pasaban unos a otros. Lamentablemente Wiland perdió.
Afortunadamente nadie logró darle en el trasero mientras que el portavoz del equipo tuvo que salir a aclarar que el hecho solo se trató de un juego, debido a que las cámaras tomaron la secuencia y las imágenes dieron vuelta al mundo.
"Es ridículo decir que fue un acto de acoso. Era simplemente un juego. Los que juegan al fútbol saben que se hace por diversión", afirma el responsable de prensa de la Federación.
De esta manera los jugadores tratan de pasarla bien antes de que Suecia se enfrente este viernes con Inglaterra por la Eurocopa.
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